Al final el pobre Bill se quedó dormido pero porque su cuerpo no resistió más, aunque era repugnante tener encima a ese tipo que roncaba lo bueno que cuando comenzó a babear se volteó. Cuando despertó Levy, notó que su preciada adquisición estaba dormida, le acaricio el rostro.
- Ay, mi querido Bill me la pasé de lo más asombroso, de verdad que eres único, claro que me hubiera gustado que cooperaras, me gustaría que me sonrieras como lo haces con tú hermano… con el tiempo no nada más tu cuerpo será mío, sino también tú corazón.
Ante aquel contacto Bill abrió pesadamente sus ojos, y lo vio, por lo que se asustó y comenzó a llorar.
- ¿No me digas qué vas a llorar de nuevo?
- No te dije, tú lo has visto…
- Que irreverente eres, pero ya tendré tiempo para castigarte…
- Ya tienes lo que querías, déjame ir.
- No mi amor, es cierto tuve tú hermoso cuerpo y tú amada virginidad, pero quiero más.
- No… no, yo no quiero…
- A nadie aquí le importa lo que quieres o no. Te voy a desatar para que te asees, hay ropa limpia y que puedes usar en el baño, claro que sería muy tentador bañarte yo mismo…- lo dijo mientras pasaba la yema de sus dedos por su piel desnuda - Lo haré si me lo pides.
Bill solamente lo vio con coraje y le volvió a escupir en la cara, a lo que Levy lo tomó bruscamente de la barbilla y lo besó a fuerza mientras introducía unos dedos en el interior de Bill, quien sintió horrible, después los sacó bruscamente.
- Quiero ser amable contigo y tú no me dejas opción…
- Por favor…-decía entre lágrimas- Ya no… ya no más, por favor…
Bill se veía muy frágil y tenía mucho miedo, y aunque no lo pareciera le conmovió a Levy, lo desató y lo cargó hasta la bañera.
- Me voy, te dejaré. Aunque regreso en dos horas, de una vez te digo, que no voy a parar y espero que seas más respetuoso conmigo- salió del baño.
Bill lloraba, le dolía horrores su cuerpo y el agua caliente le aminoraba el dolor, cuando decidió salir, efectivamente encontró ropa de su talla y de su estilo, ese tipo lo había investigado bien, decidió ponerse unos pantalones negros, una playera negra y una sudadera negra también, pues no estaba de ánimo de usar otra cosa, Cuando salió la cama ya estaba hecha y con sábanas limpias y el desayuno en una mesita, decidió acostarse y sus ojos se cerraron automáticamente.
- Tom… sálvame…- fue lo último que dijo antes de quedar inconciente.
Por otro lado…
- ¡LARGUENSE!
- Hay no se enoje señora…- decía Georg tratando de esquivar una enchilada que Maribel Guardia le arrojó.
- Es nuestro amigo…- decía Gustav.
- Se nota que no entienden el término “hablar a solas”- le arrojó a Gustav una quesadilla.
- Pero ¿por qué no podemos estar?- preguntó Latin
-¿Tú también?- le arrojó a su compañero un vaso de atole que afortunadamente no le cayó.
- Quien sabe que le quiere hacer- dijo Pewee, Maribel le aventó una enchilada de salsa verde que le cayó bien en los ojos- ¡AH, MIS OJITOS!
- ¿Y bien? ¿Quieren qué les pase lo mismo?- los otros tres se hicieron para atrás y se retiraron a comer muy lejos de Maribel y de Tom.
- ¿No te gustó tu caldito de pollo, cariño?
- No tengo hambre.
- Ahora sí, dime ¿qué pasó?
- Yo, tengo que rescatar a Bill, sé que está en ese edificio de cuarenta pisos.
- Sigues creyendo que lo tiene Levy.
- Si…- Tom hizo cara de molestia
- Tranquilo yo te creo, es más vamos por un equipo para ir hoy mismo al edificio de 40 pisos, pero debes saber que solo hay poca gente que lo conoce bien, pues parece un laberinto y más para llegar a la habitación más alta.
- Ahí es donde está mi hermano… Yo lo vi, él sufría, ese tipo… lo tocaba… él lloraba…- Tom se derrumbó.
- Te prometo que lo castigaremos, no te preocupes.
- El castigado debería ser yo, por permitirlo.
- Tú ni nadie tiene la culpa, descuida lo rescataremos, pero come algo si no lo haces tú cuerpo se debilitará y Bill te necesita bien.
- Tienes razón- y Tom comenzó a comerse ese caldito de pollo que le sentó bastante bien.
Por otro lado… Bill seguía durmiendo, durmió más de tres horas seguidas por lo que Levy ya estaba ahí desde hacia mucho rato, lo observaba dormir y removerse en sueños, hasta que despertó.
- Al fin despiertas…- Bill lo miró con miedo y trató de alejarse de él, pero de su muñeca derecha notó la presencia de una esposa que lo ataba a la cama- ¿Por qué me huyes? Dime…- le acaricio su rostro- Me duele que me desprecies.
- Pues te desprecio, por secuestrarme, por violarme, por separarme de mi hermano…
Levy se exaltó saltando de la silla en donde estaba y volviendo a su fase de animal salvaje.
- Si tanto miedo te doy ya no me provoques- le dijo cuando notó la expresión de temor de Bill.
- Yo… me quiero ir de aquí…
- ¡NO! ¡Eso nunca, ahora eres mío!
- ¡Yo no soy tuyo!
- Bill- se tranquilizó un poco- Te propongo algo, mira, por esta noche no te haré lo que te hice anoche, por hoy te dejaré descansar. Pero quiero que comas algo, no quiero que te enfermes
Bill no sabía que hacer, que lo dejara tranquilo por un día o unas horas era mejor que nada, o eso esperaba, con ese tiempo tal vez se le ocurriría un plan.
- Pero, para eso quiero que hagas algo por mí, no como un favor sino como una orden, quiero que me cantes algo con tu hermosa voz.
- Supongo que sí, pero espero que no me exijas mucho. De una vez te advierto que no me siento muy animado y que si no canto como esperas no te molestes.
- Tranquilo.
Bill cantó con melancolía y dolor, muy bonito pero muy triste, cuando terminó Levy le aplaudió.
- Hermoso…
- Quiero que me respondas una pregunta.
- Claro.
- ¿Por qué haces todo esto? ¿Solo por una calentura? ¿Solo por que te atraje físicamente?
- No es una calentura, es cierto que me atraes de esa forma pero no es solo eso, eres todo tú, hago todo esto por que te amo.
- No, tú no me amas.
- Eso no lo sabes…- después fue ignorado por Bill- Lo prometido es deuda, me voy para que descanses, te voy a quitar la esposa para que puedas moverte libremente, buenas noches- y salió de la habitación.
- Al menos cumplió su promesa- se dijo para sí Bill- Tom, mi Tom, ven por mí… aunque ¿qué pasará cuando sepas que yo…? ¿Me querrás aún?
Flash Back
- Ay, Tomy se nos hizo tarde.
- Pero ya llegamos, además el par de sopencos nos van a cubrir
- Espero que David no se haya dado cuenta
- No lo hará, ven duerme conmigo Bill
- Claro Tomy.
Los dos comenzaron a besarse, beso que se tornaba más apasionado, poco a poco Tom metía mano a Bill, pero sintió como temblaba bajo de él.
- Sabes que lo haré cuando estés listo.
- Gracias Tomy, parece ridículo pero…
- Shhh, tranquilo amor, tú primera vez será de lo más especial, tú mereces lo mejor.
- Te amo Tomy.
- Yo te amo más, ven durmamos.
Fin del Flash Back
Bill seguía llorando, no podía dejar de pensar en su adorado hermano, pero estaba seguro que lo iría a rescatar lo presentía.
- Ya me pico un mosco- se quejaba Gustav
- Eso no es un mosco, es una pulga- decía Latin
- Genial, por querer que nadie nos vea tuvimos que escondernos en las penumbras en donde reinan las pulgas y ahora ya quedé pulgoso.
- De verás que son bobos, no es una pulga ni un mosco es un granote que te salió en la frente- decía Pewee.
- ¿Te encuentras bien Tom?- preguntó Georg
- La verdad no, quiero tener a Bill en mis brazos ya. Además de que ya pise algo…
- Genial pisaste el gansito que traía- decía Georg
- Ya estamos adentro lo mejor será separarnos- dijo Maribel
- ¿Cuándo nombramos a la señora como líder?- se quejó Georg
- No sé y no importa- dijo Tom
- Latin y Tom van a ir por el centro, yo y Gustav vamos por la derecha y Pewee y Georg por la izquierda…
- Yo no quiero ir con él me roba mis estampas del gansito…
- Yo tampoco quiero ir con él su nombre es raro….- decía Georg
- Aún traigo enchiladas y pienso arrojárselas sino están de acuerdo- ya no hubo objeciones y fueron a sus direcciones adecuadas.
Por otro lado….
- Hola jefe. ¿Por qué no está con su amado?- dijo Poncho Herrera
- Por que le prometí que hoy no lo molestaría
- Ah, a de ser por que extraña a su hermano.
- Pues sí, después de todo son gemelos. Pero Tom tendrá que aprender a llamarme cuñado pues haré que Bill me ame.
- Pues lo dudo muchísimo
- Y se puede saber por que cara de camaleón nalgoso
- Pues él no lo ama por que ya tiene a alguien que ocupa ese lugar y no es usted.
- ¡¿Quién es ese?!
- Pues quien más, su hermano. …l día que descubrí que era virgen también descubrí que él y su hermano tienen una relación más que de hermanos.
- ¡¿QU…?!- Levy Estaba furioso y subió hecho una bestia a la habitación de Bill, quien se exaltó cuando abrieron la puerta de repente.
- ¿Q… qué… pasa?- preguntó con miedo al ver a Levy en ese estado, levantándose de la cama y caminado hacia atrás.
Levy se acercaba a su presa, lleno de furia en sus ojos…
