______________dos meses_______________
Tom’s POV
Desperté con la carrera matutina de Bill al baño. Corrí tras él y le cogí el cabello para que expulsara todo sin ensuciarse. Al terminar tiró el agua y se lavó los dientes. Me sonrió.___
-Ya sólo vomito una vez por mañana, es un avance –podía notar unas ligeras ojeras bajo sus ojos, pero su sonrisa aplacó mi preocupación-
-Estás seguro de que estás bien? –Le acaricié la mejilla-
-Sí, sólo muerto de sueño.
-Últimamente duermes mucho, pero hoy es sábado así que aprovecha de descansar.
-Ven a la cama conmigo, sabes que no puedo dormir sin ti.
-Ok, voy por mi laptop y vuelvo –fui en busca del aparato al escritorio, así aprovecharía de adelantar trabajo, para no agobiar a Bill-
-Ven mi amor –palmeó la cama y me hizo lugar. Me acomodé y puse el laptop sobre mi regazo, y mi amado pelinegro se pegó a mi lado y en dos minutos estaba completamente dormido. Le revolví el cabello y suspiró, era adorable verle así tan entregado, tan confiado en mi cama, desearía siempre poder darle esa seguridad. Estuve trabajando y contemplando a mi amado por dos horas hasta que mi bello durmiente se estiró-
-Hola precioso, descansaste?
-Sí, soy todo un perezoso.
-En el próximo control le preguntaremos al doctor si es normal, no quiero que sea una anemia y no te estemos tratando como se debe.
-No te preocupes, debe ser el bebé que me quita las energías.
-Hablando del bebé, te voy a poner la crema en la pancita.
-Está bien, así no se pone fea después, no quisiera que mis tatuajes se deformaran.
-A propósito, qué te dijeron tus padres por los tatuajes?.
-Oh lo de siempre, mi papá casi me mata a palos, pero ya estaban hechos, no los podría borrar.
-Y lo dices así tan tranquilo?
-Creo que siempre fui la oveja negra de la familia.
-Yo creo que eres el más especial de tu familia y me saqué el premiado al encontrarte.
-Dios nos unió, es simplemente maravilloso.
-Hablando de unión, ya has pensado en una fecha para el matrimonio, quisiera que nos casáramos antes de que nazca el bebé.
-Tal vez en vacaciones, así tenemos nuestra luna de miel –me dijo coquetamente, no pude evitar besarlo-
-Me parece sensacional, arreglaré lo de las vacaciones con la jefa. Ahora quítate la polera.-me obedeció y comencé a aplicar la crema en su vientre plano. Mi pequeño arqueó la espalda y gimió- Cielo es sólo un masaje –le dije sonriendo-
-Pues ya me excitaste, no sé qué me pasa, apenas me tocas me caliento, me siento un poco sucio.
-Soy tu pareja, no tienes por qué sentirte así –me acerqué y lo besé, sin dejar de masajear su vientre-
-Hazme el amor Tomi, por favor, te necesito.
-Como quieras. –Obviamente no le iba negar lo que mi cuerpo también deseaba. Lo besé apasionadamente y fundimos nuestros cuerpos en una danza erótica, llena de gemidos, jadeos y suspiros, diciéndonos cuanto nos amábamos. Al terminar sudados, pero satisfechos, el estómago de mi pelinegro dio un rugido-
-Tengo mucho sueño –dijo-
-Pero también mucha hambre, no te dejaré dormir sin comer, a la ducha.
-Pero Tomi, quiero descansar. –Se quejó haciendo un delicioso puchero-
-Después de comer descansarás y yo te haré compañía.
-Lo prometes?
-Cuándo te he mentido?
-Está bien, pero báñate conmigo, si? –lo tomé de la mano y ambos desnudos nos fuimos a bañar. Bill siguió tentándome y terminamos haciendo el amor bajo el agua, por lo tanto se nos hizo tarde para cualquier desayuno, debía llevarlo a almorzar-
-Bill hay un nuevo restaurant italiano, te gustaría ir?
-mmmmm, pasta, que rico, muero de hambre.
-Yo estoy listo.
-Deja que me ponga un poco de cacao en los labios y listo.
-Voy a sacar el auto, te espero allí. –salí y fui a la cochera, saqué el vehículo y vi salir a mi moreno, hermoso como siempre con su bolso enorme.- Qué traes ahí?
-De todo un poco, desde barritas energéticas, hasta un cambio de bóxer y pantalón, por si no alcanzo a llegar al baño. –ambos reímos-
-No creo que los necesites.
-No estés tan seguro, últimamente voy al baño a cada instante y muchas veces tengo que correr para no orinarme en los pantalones jajajaja.
-Supongo que es por el embarazo.
-Debe ser.
-Amor, pasaré a echar combustible –me estacioné – cielo no te molesta el olor?
-Hasta aquí se siente el olor del McDonals.
-Me refería al olor de la gasolina, pero, quieres papitas?
-No, quiero una hamburguesa gigante. –sonreí-
-Bill, tú eres vegetariano.
-Mi estómago se endureció, Tom –me miró fijamente- necesito comer una hamburguesa.-lo dijo con una urgencia que lo llevé de inmediato.-
-Quiero el combo 5 y el 7.
-Estás seguro?, es bastante.
-Y unos nugguets de pollo.
-Está bien, ve a sentarte, yo te alcanzo. –Me entregaron el pedido en dos bandejas rebosantes de comida. Bill me miraba con los ojos brillantes-
-Esto es genial –dijo mordiendo su hamburguesa doble queso-
-Sólo espero que no te arrepientas después.
-Estoy alimentando a este pequeño que saldrá carnívoro igual a su padre y me hace comer carne, mmmm, pero está mmmm, deliciosa.
-Está bien cielo, disfrútala y no comas tan rápido.
Bill’s POV
Ya era lunes y gracias a la jefa entrábamos una hora más tarde. Hoy me sentía extraño, no sé exactamente qué era, me sentía débil, pero no quería decir nada para no asustar a mi Tomi. Llegamos al trabajo, tenía clases de música la primera hora, así que me separé de mi amorcito y me preparé mentalmente para este día. Hoy me tocaba ensayar la canción que cantaré con otra de las chicas de la clase para la exposición. ____
La maestra puso la pista y la chica empezó con su parte, empecé a sudar frío, sentí que las rodillas me temblaban y luego todo negro.____
Normal POV
-Tío Bill –se oyó el grito de las personas de la clase, el joven maestro se acercó al pelinegro y se percató de una sustancia viscosa que calificó como sangre-.
-Samanta ve por el profesor Kaulitz, Estela ve por la directora ahora! –ambas pequeñas corrieron en dirección a los adultos. –
-No quiero que muera el tío Bill –decían las más pequeñas de la clase-
-Tranquila niñas, tío Bill sólo está desmayado. –Calmaba el profesor-
En otra sala Tom se sorprendió al sentir que golpeaban tan insistentemente la puerta, sin embargo un repentino presentimiento le hizo correr.___
-Samanta qué pasa?
-El tío Bill… el tío Bill –los ojos lagrimosos de la niña no la dejaban hablar, pero para Tom fue suficiente y corrió hacia la sala de música-
-Bill –gritó y se tiró al suelo al verlo inconsciente –
-Está sangrando Tom –le dijo el otro maestro. Se puso de pie y lo tomó con sumo cuidado y salió con rumbo a la clínica del doctor Jost. Por el camino se topó con la directora que lo observó muy preocupada-
-Ve con él, te alcanzaré en la clínica –el joven de trenzas asintió y salió de ahí con rumbo al lugar donde podrían ayudar a su moreno que aun no recobraba la conciencia. La señora Albornoz fue por el bolso de Bill y tras dejar instrucciones, también se dirigió a la clínica, sin embargo al estar en su auto el sonido de un celular la desconcentró, se estacionó y se percató de que era el teléfono de Bill, vio la pequeña pantalla que decía “mamá llamando”, desconociendo la situación familiar de sus trabajadores contestó.-
-Halo? –Dijo algo cortada-
-Está mi hijo?
-Señora, usted habla con la jefa de su hijo.
-Por qué? Hay algún problema?
-Su hijo perdió la consciencia, en estos momentos Tom Kaulitz lo lleva a la Clínica.
-Dios mío, qué le pasó?
-Al parecer se desmayó, pero en su estado es peligroso para el bebé.
-Para el bebé? –preguntó extrañada-
-Sí, como tiene sólo dos meses de embarazo, es peligroso, por eso Tom se lo llevó de inmediato.
-Dígame por favor a dónde lo llevaron?
-Es la Clínica de maternidad Saint Rose.
-Gracias, voy para allá. –ambas colgaron-
Tom’s POV
Estaba completamente histérico, miraba por el espejo retrovisor y Bill seguía inconsciente, eso me desesperaba, además sangró, aunque dejó de hacerlo, me preocupa el bebé, si algo le pasa al niño y daña a Bill de paso, no podría soportarlo.___
-Bill cariño resiste, ya casi llegamos. –Tomé el celular y marqué a la clínica diciéndoles por qué iba y en qué condiciones iba Bill. Al llegar una camilla me esperaba. Ayudé a subir a mi pequeño y se lo llevaron. Corrí tras ellos, hasta que me dejaron en un pasillo. Me senté un tanto aturdido y llamé a mamá-
-Hijo qué pasa?
-Es Bill mamá –no lo soporté más y rompí a llorar- perdió el conocimiento y estaba sangrando. Mamá si les pasa algo, a él o al bebé me moriré –lloré-
-Tranquilo hijo voy para allá. Dónde estás?
-En la Clínica Saint Rose. –sollocé-
-Tranquilo, mami va para allá. –colgó, pero aunque sus palabras me tranquilizaban, no podía dejar de llorar-
-Tom? –levanté la vista era mi jefa, traía el bolso de Bill- Cómo está?
-No lo sé –lloré de nuevo- no ha salido nadie a decirme nada, me temo lo peor –rompí en un llanto amargo, mi jefa se sentó a mi lado y trataba de consolarme- No quiero perder a mi hijo, no quiero, no quiero que Bill sufra, él no se lo merece, él le canta canciones de cuna por las noches, yo…yo no quiero perderlo. –Vi como la madre de Bill se llevaba las manos a la boca tras haberme escuchado-
-Entonces… es verdad… no fue un mal entendido. –me paré y la abracé-
-Bill está embarazado, pero ahora…yo…yo no sé nada, no quiero perder a nuestro hijo, no quiero que Bill sufra –ella me abrazó y me consoló dándome palmaditas en la espalda-
-Dime hijo qué pasó?
-Según lo que me dijo el maestro, Bill se desmayó y no recuperó la consciencia, pensamos que fue por el golpe que sangrara. –Dijo mi jefa-
-Cuánto tiempo tiene de embarazo?
-Dos meses –le dije limpiándome las lágrimas-
-Mira Tom, no sé si esto te servirá para calmarte, pero en mis ocho embarazos he sangrado durante los tres primeros meses, siempre pensé que tenía pérdida o aborto espontáneo, pero no, sólo eran cosas del cuerpo, y todos mis hijos nacieron bien, a lo mejor Bill tiene el mismo problema que yo y este sangrado no es más que un susto. –trató de calmarme-
-Ojala sea sólo eso, Dios que sea sólo eso –miré al cielo. En eso salió el doctor Jost-
-Tom quédate tranquilo.
-Cómo está Bill? Y el bebé?
-Ambos están bien. No fue más que un desmayo, pero Bill está sufriendo una pequeña anemia por eso no recobró el conocimiento de inmediato.
-Anemia, pero cómo? Yo lo alimento bien. –me preocupé-
-No es sólo por la alimentación, es porque el bebé consume muchas más energías de las planeadas, es un bebé muy fuerte. –Todos suspiramos- El sangrado fue sólo un susto, no le ha pasado nada al niño, aunque hay que evitar a toda costa que se repita una caída como esta.
-Entiendo, él está consciente ahora?
-Le pusimos unos calmantes, ya que el golpe en su estado hipersensible seguro lo va a resentir.
-Puedo verlo?
-Lo están trasladando a una habitación privada, pero será más seguro que pase la noche aquí.
-Perfecto –dije más tranquilo, el doctor se retiró-
-Bueno como ya sé que todo está bien, me iré. –Dijo la mamá de mi moreno-
-No le gustaría verlo?
-Claro que sí, pero salí tan rápido que ahora tendré que inventar algo para que mi esposo no se moleste.
-Entiendo, puede llamar cuando quiera.
-Gracias Tom, gracias por querer a mi pequeño.
-Es algo natural, nadie puede no querer a Bill. –me besó la mejilla y se fue-
-No sabía que había problemas en la familia del bombón –dijo mi jefa-
-Es peor de lo que parece, pero ahora Bill tiene una nueva familia, el bebé y yo.
-Así se habla. Bueno Tom, mañana tú y Bill tienen el día libre. Cuídalo mucho y si necesitas otro día, pues me llamas y lo arreglamos.
-Gracias jefa.
-Bien, ahora te dejo, ve a besar a ese ángel. Adiós
-Adiós –me dirigí a la habitación de Bill, le acaricié la mano y luego me senté en una silla junto a su cama-
Creo que me dormí en la noche y desperté cuando una enfermera entró a revisar a mi niño. Me quedé sentado mirándolo, cuando sus párpados empezaron a moverse, me acerqué y tomé su mano, acariciándola con mi pulgar.-
-Tomi? –Dijo pestañando, seguro le molestaba la luz-
-Aquí estoy amor.
-Me caí?.
-Te desmayaste.
-Y el bebé? –Puso su mano en su vientre-
-Está bien, es un bebé fuerte, te está dejando sin energías, así que debes comer más.
-Me muero de hambre –reí, espera…llamaré a la enfermera. Tomé el pequeño comunicador de la habitación y pedí el desayuno-
-Bill –me miró a los ojos- nunca me des un susto como este ok? –mis ojos se aguaron y la voz se me quebró- Si te llega a pasar algo o al bebé, yo… no podría soportarlo, me entiendes, eres demasiado importante para mí.
-Lo siento mi amor –lloró conmigo- no quise que pasara esto.
-Tienes razón, lo siento todo esto me puso sensible –reí y él rió conmigo- creo que me estás contagiando con tus hormonas.
-Te amo tanto Tomi.
-Y yo a ti y al bebé –lo abracé, en eso llegó la enfermera con un carrito y dos bandejas-
-El desayuno –nos pasó las charolas- el doctor vendrá dentro de media hora para darle el alta.
Comimos en silencio, Bill terminó de prisa y acabó con la mitad de mi desayuno, sí que tenía hambre. Después el doctor revisó a mi amor y nos dio la autorización de irnos. Al momento de cambiarse Bill tomó su bolso y bromeó-----
-Te dije que necesitaría los pantalones extra.
-Espero que nunca más los necesites. Bill?
-hhnn?
-Tu madre estuvo aquí. –se giró bruscamente-
-Acaso lo sabe?
-Sí
-Y cómo lo tomó?
-bastante bien, incluso me dio ánimo al contarme que ella también sangró en sus embarazos.
-No puedo creerlo.
-Te llamará cuando pueda, tú sabes, por tu padre.
-Ya veo.
-Bueno vamos a casa, tenemos el día libre y quiero regalonearte todo lo que pueda.
-Tomi… podemos… comprar hamburguesas?
-Es otro antojo?
-No, qué es si no, soy vegetariano y este pequeño me obliga a comer carne.
-Pero el otro día en el McDonals no te veías muy obligado jajaja
-En serio Tom, si no como eso me duele la pancita, se me pone dura, mira siente –toqué su vientre y efectivamente se endurecía-
-Quieres ir al McDonals de nuevo o te las compro y las hago en casa.
-Vamos allá, así comemos papitas y nugguets –se relamió los labios-
-Y eso que acabas de tomar desayuno.
-Lo siento, estoy embarazado.
-Pide lo que quieras amor, para eso me tienes a mí.
-Ayúdame a caminar, me siento completamente apaleado.
Bill’s POV
Comí como si hubiera pasado por una hambruna, Tomi me miraba pacientemente y pidió un helado de chocolate, siendo que él odia el chocolate, tal vez le estoy pegando los antojos. ____
-Me muero de sueño amor.
-Debes descansar, vamos? O quieres que compre algo más?
-No sólo vámonos a dormir.
-Sí, yo también estoy cansado.
-Apuesto a que casi no dormiste en el hospital.
-La verdad es que estaba pendiente de ti.-Regresamos rápidamente y me fui directo al baño, odiaba este problema, orinar a cada momento me dejaría seco-
-Tomi ven a acostarte conmigo –le llamé quitándome la ropa, mi cielo llegó y tras desnudarse se metió en la cama conmigo, en eso sonó mi celular-
-Yo te lo paso –buscó en mi bolso y me lo pasó-
-Hola mamita.
-Cómo estás pequeño?
-Ya estoy en casa, me siento cansado, pero bien.
-Es normal, cuando estuve embarazada siempre estaba cansada y contigo fue peor, me lo pasaba durmiendo.
-Oh mami, gracias por preocuparte, te necesito tanto, tengo tantas dudas.
-Lo sé cielo y apenas pueda me escaparé para verte y darte consejos. Hoy sólo quería asegurarme que estuvieras bien, para que el pobre Tom no sufriera un infarto por lo angustiado que estaba, se nota que está loco por ti.
-Y yo estoy loco por él.
-Lo sé, y estaré orando por ustedes, en especial por el bebé, ahora debo irme, tu padre sólo salió a comprar pan, y puede volver en cualquier momento.
-Está bien mamá, no te metas en problemas por mí.
-Quisiera contarle a tu padre, a lo mejor se suaviza al saber que será abuelo.
-No mamita, no te arriesgues, aun es muy pronto.
-Respetaré tu opinión, Adiós hijo te quiero.
-Te quiero mamita, adiós –colgué, me pegué al cuerpo de mi trenzadito- Ella quiere contarle a mi padre, piensa que se suavizará si sabe lo del bebé.
-La comprendo, pero no quiero arriesgarte ni al bebé, él es muy violento.
-Lo sé, pero algún día lo sabrá.
-Sí, pero espero que el bebé ya esté en nuestros brazos, para que nada malo le pase, así los podré proteger a ambos.
-Te amo Tomi, eres lo mejor que me ha pasado y lamento traerte el peso de mis problemas familiares.
-No te disculpes, uno no escoge a la familia.
-Pero yo te escogí a ti y tú eres mi familia ahora.
-Tienes razón, somos una familia los tres –me acarició el vientre-
-Sí que lo somos.